- Petr Herman
- BornsteinLyckefors
Polestar
Polestar es la marca de coches de alto rendimiento del Volvo Car Group que ofrece desde 2017 una cartera de coches eléctricos a medida para responder a la demanda de la industria de los coches eléctricos que está surgiendo rápidamente.
Para reflejar la naturaleza dinámica de esta prestigiosa marca se encargó un nuevo edificio de oficinas cerca de la sede de Volvo Car Group en Gotemburgo, Suecia. Diseñado por los renombrados arquitectos suecos Bornstein & Lyckefords, el resultado es un brillante sueño velado en blanco.
Una nueva Sede Central que refleja una Marca en evolución
La nueva sede de Polestar implica la renovación de un viejo y desgastado edificio de hormigón de los años 80’s. El nuevo edificio tenía que enfatizar el diseño y el rendimiento energético. Cuando nos pidieron que trabajáramos en este increíble edificio, alguien describió su visión del edificio como un concepto de alta gama premium ‘donde Apple se reúne con Hugo Boss’,” dice Daniel Nestenborg, CEO de Ferm & Persson AB, que colaboró en la nueva fachada, ventanas y protección interna contra incendios.
Cuando nos pidieron que trabajáramos en este increíble edificio, alguien describió su visión del edificio como un concepto de alta gama premium ‘donde Apple se encuentra con Hugo Boss’
Minimalista y vanguardista, el edificio consta de tres niveles y ofrece 3.800 m² de espacio de oficinas y área de desarrollo para unos 200 empleados, así como áreas de exposición y exhibición para varios coches. Por su diseño, el edificio y el entorno de trabajo apoyan la colaboración interfuncional en todo y fortalece aún más la cooperación entre la marca Polestar y su empresa matriz, Volvo.
Una Fachada desarrollada desde el suelo
El siguiente reto en el diseño de la fachada vino de lidiar con las condiciones del edificio existente. Esto fue particularmente difícil ya que el diseño incorpora un edificio antiguo con aberturas de aproximadamente 3 metros que no se pueden ampliar para cumplir con los requisitos del diseño moderno y expansivo con aberturas de 15-20 metros. Como resultado, el diseño respondió de manera que las viejas ventanas fueron diseñadas como ‘cajas’ selladas herméticamente al vidrio exterior. ‘En esencia, la solución actúa como una doble fachada, o exoesqueleto,’ explica Nestenborg.
En esencia, la solución actúa como un doble fachada, o exoesqueleto
El resultado es una traducción arquitectónica de una marca en evolución constante, que refleja el diseño y la tecnología de los coches de Polestar y muestra que el cielo es el límite.
Sistemas Reynaers utilizados
Colaboradores participantes
Elaborador
- Ferm & Persson