Het Kleine Krikhaar

Al entrar en los terrenos de Kleine Krikhaar, hay que echar mano de la imaginación, porque cuando se ve el diseño alargado y abstracto del granero, nunca se habría adivinado que aquí había un antiguo granero. La VitraHaus de Weil am Rhein (Alemania) fue mi gran inspiración. Las mismas líneas limpias, la forma alargada y los frontones de cristal se encuentran en mi diseño". Gracias al zócalo elevado y a la fachada final que sobresale, la casa parece flotar sobre el terreno. El estudio de arquitectura Reitsema & Partners, junto con las autoridades locales, se volcaron de inmediato en un diseño que realzara el paisaje. Weerink reflexiona: "Queríamos partir del diseño original: una estructura independiente, sin anexos. Además, el paisaje ha sido una gran influencia en todo el proyecto. Por ejemplo, hay un gran árbol situado en nuestros terrenos que actuó como punto de anclaje. La casa está colocada de forma cuadrada a esta línea de visión y a un metro y medio por encima del campo. Esto crea ese efecto de flotación y enmarca el paisaje".

Las fachadas exteriores de Kleine Krikhaar están construidas con madera platinada. Estos listones de madera envuelven la estructura de vigas de acero utilizada como parte del método de construcción de la casa. Esto permitió ocultar por completo los cables, los desagües y otros detalles de la fachada exterior. Esto, junto con la ventana alargada, acentúa el aspecto limpio y minimalista. Weerink diseñó la casa con la idea de hacer entrar el exterior. Gracias al diseño transparente, uno se siente realmente parte del paisaje natural. Cuando está a punto de estallar una tormenta, mi familia y yo apagamos todas las luces y vemos los rayos a través de la claraboya de nuestro salón. Ningún cine puede competir con eso".